NORD STREAM. EL GAS RUSO DIRECTO A EUROPA

Hoy, los líderes de Rusia, Alemania, Francia y Holanda pusieron hoy en marcha la primera línea del gasoducto transbáltico, Nord Stream. El presidente ruso Dmitri Medvédev, la canciller alemana Angela Merkel, el primer ministro holandés Mark Rutte y el primer ministro galo François Fillon abrieron la simbólica válvula del gasoducto en una ceremonia celebrada en la ciudad alemana de Lubmin, en la costa del Báltico.

El gasoducto, cuyo primer ramal permitirá el transporte adicional de 27.500 millones de metros cúbicos de gas a Alemania, desde donde será redistribuido a Francia, Holanda, Dinamarca y Reino Unido, duplicará su capacidad con la puesta en funcionamiento de un segundo ramal.

En la compañía operadora del gasoducto participan, además del consorcio ruso Gazprom con la participación del 51%, de las alemanas E.ON y BASF/Wintershall, la holandesa Gasunie y la francesa GDF/Suez.

Hasta aquí la noticia, pero… ¿Qué implicaciones geopolíticas hay detrás de semejante infraestructura?

Para empezar es importante ser conocedores de algunos datos…

  • El gas ruso cubre más del 25% del consumo europeo y alrededor del 35% del alemán, lo que convierte a la UE en un importante mercado para Rusia. De hecho, en su principal mercado, porque aparte del volumen en quien mejor paga por su gas.
  • Rusia posee las principales reservas mundiales de gas a nivel mundial con un 24% probado. Por tanto, es el mayor productor y exportador mundial de gas.
  • Aún así el 70% de su producción va destinada al mercado interno. El Estado subsidia los precios que paga el consumidor final (sea el sector eléctrico, las industrias o los hogares). Gracias a ello a favorecido el crecimiento económico. Por tanto Gazprom en realidad pierde dinero en el ámbito nacional y lo que tiene que compensar con las exportaciones. Por tanto, una gran objetivo ruso es mejorar la eficiencia energética del mercado interno ruso. De eso modo aumentará el porcentaje de gas disponible para la exportación fuese mayor.
  • Esta infraestructura precisará de grandes volúmenes de gas para ser rentable. Por ello para Gazprom es vital que la demanda de hidrocarburo en Europa vaya en aumento.
  • En Europa el consumo anual se sitúa en 500 mil millones de metros cúbicos. La producción propia en la Unión Europea cubre apenas una tercera parte de esa cantidad y las cifras van en declive.

ANÁLISIS

Gazprom y sus socios de Nord Stream AG estiman y en ello basan sus esperanzas que Europa se verá obligada a aumentar su demanda de gas durante las próximas décadas por dos motivos principales:

a) El incremento del consumo.
b) Suplir la caída de la producción en el mar del Norte.

Desde luego Europa intentará frenar la dependencia del gas ruso. De hecho ya existen varios pleitos contra Gazprom por practicas monopolistas. Pero será una tarea complicada, sobretodo en gran medida por las necesidades del gran peso pesado de la Uión Europea, Alemania y la encrucijada en la que se encuentra su canciller Angela Merkel:

a) En Alemania, los “verdes” cuentan con el apoyo de más del 20% de la población y por tanto también en el parlamento, y ven en el gas la gran alternatica contra los hidrocarburos.
b) El Gobierno de Merkel ha decidido este mismo año la desconexión definitiva de todas sus centrales nucleares antes de 2021. La única manera de suplir dicha capacidad energética de forma «limpia» es mediante el gas.

Por último, en toda esta historia, la gran perjudicada es Ucrania, cuyos gasoductos pueden transportar hasta 150.000 metros cúbicos al año entre Rusia y la UE. Los ucranios han perdido su gran carta para presionar a Moscú los precios del gas y el crudo. Recordemos que en 2006 y en 2009, las autoridades de Ucrania cortaron en repetidas ocasiones el tránsito de combustible por su territorio, como medida de presión a Rusia. Aquello aceleró los planes del Nord Stream y como herencia de aquellas prácticas hoy en dia no gozan del «cariño» de la UE y Alemania especialmente ni de Rusia que ahora podrá jugar un papel mucho más duro en sus negociaciones bilaterales. Además verá reducidos los considerables ingresos que les reportaban el transito del gas por sus infraestructuras.

CONCLUSIONES

La apertura del Nord Stream sella «de facto» un matrimonio de conveniencia entre Rusia y Alemania beneficiosos para los dos colosos que actualmente son locomotoras de la economía mundial. Ambos se necesitan, pero como todo matrimonio de conveniencia, no evitará que los rocen sean continuos durante los próximos años. Es el precio de la dependencia.